El ejercicio beneficia no solo a nuestro cuerpo, sino también al
bienestar mental, el sueño saludable y la condición general. Por lo tanto,
sería una pena evitar el deporte solo por dolor en las articulaciones. Es,
pensando en ello, que a continuación compartimos contigo algunos consejos de
importancia sobre cómo evitar esta molestia:
Todo con moderación
Las actividades deportivas tienen un beneficio innegable para el
cuerpo humano, especialmente hoy en día, cuando muchas personas pasan la mayor
parte del día sentadas frente a una computadora o mirando un teléfono móvil.
Aunque las articulaciones sensibles pueden arruinar el placer del movimiento,
sería un error ignorar todas las actividades. Por lo tanto, la prevención es
importante para prevenir problemas.
Agrega carga
gradualmente
Si recién estás comenzando a practicar deportes, no debes cambiar de fuerza, sino agregar carga lentamente para evitar sobrecargar el sistema musculoesquelético. Lo mismo se aplica si has sufrido un accidente o lesión. Además, aquí se deben respetar las recomendaciones del médico tratante.
Después de cualquier lesión, siempre se forma una cicatriz, que
sigue siendo una parte menos funcional de la articulación. Para que la
articulación se adapte bien al cambio dado, es necesario ir sumando la
actividad deportiva de forma paulatina para que la parte debilitada no se
desgaste más por la actividad exagerada.
Además, la sobrecarga no siempre se manifiesta solo durante las
actividades deportivas, sino también con un espacio de varias horas, cuando,
por ejemplo, se llena la articulación de la rodilla. Por tanto, es necesario
aumentar la dosis de entrenamiento de forma paulatina y esperar siempre a que
la articulación dañada consiga regenerarse.
Nunca olvides
estirarte
Si ya estás lidiando con problemas en las articulaciones, elige
actividades que no las agoten demasiado, por ejemplo, caminata, ciclismo,
natación o yoga.
Por otro lado, aquellos en los que se producen choques o sobrecargas
unilaterales no son muy adecuados. El calentamiento y el estiramiento adecuados
de los músculos también son muy importantes, ya que se requiere estabilidad
para que las articulaciones y los músculos que rodean la articulación funcionen
correctamente.
Así mismo, durante la actividad deportiva en sí, es importante
“escuchar a tu cuerpo” y dosificar la carga en sí para que no cause molestias o
dolores agudos en las articulaciones.
Aliméntate
correctamente
Debido a que el sobrepeso ejerce demasiada presión sobre las
articulaciones, los médicos recomiendan principalmente la reducción de peso
cuando se sufre algún problema de las articulaciones. Esto está estrechamente
relacionado con una dieta adecuada, que ayuda a mantener un IMC normal y, por
lo tanto, mejora la salud de las articulaciones.
Por tanto, la dieta debe ser equilibrada, variada, contener un
aporte suficiente de minerales y vitaminas C, D y E, proteínas vegetales de
calidad (por ejemplo, legumbres, frutos secos), pescado, frutas y verduras.
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